BIENVENIDOS AL SITIO DE LA UNIÓN DE LOS PUEBLOS DE LA NACIÓN DIAGUITA

Afirmando, que como Pueblos Indígenas somos iguales a todos los demás pueblos en cuánto a dignidad y derechos, reconociendo al mismo tiempo el derecho de todos los pueblos a ser diferentes, a considerarse a sí mismos diferentes y a ser respetados como tales.

sábado, 10 de octubre de 2009

JUSTICIA SANTIAGUEÑA MATA ANIMALES DE INDIGENAS

A pedido de Genética del Este S.A.

Juez de Santiago del Estero ordena el secuestro y deja morir animales de comunidades indígenas diaguitas cacanos.

Más de 60 animales vacunos pertenecientes a familias indígenas diaguitas cacanos de las comunidades Ayllu Puncu Atun y Ayllu Codo son muertos, supuestamente de hambre y sed, luego de que el Juez del Crimen de 4° Nominación de Santiago del Estero, Tarchini Saavedra, ordenara su secuestro.

El pasado 15 de mayo, en oportunidad en que funcionarios del Instituto Nacional de Asuntos Indígenas (INAI) se encontraban realizando una visita a la comunidad Ayllu Puncu Atun, personal policial procedió a secuestrar animales vacunos que se hallaban en el territorio de la comunidades Puncu Atun y Codo (departamento Atamisqui), por orden del Juez Tarchini y a pedido del encargado de la empresa Genética del Este S.A., Sebastián Peuser.

El propósito de Genética del Este –que en Atamisqui aparece bajo el nombre de Elizabeth Mireya Freidenberg y/o su hijo, Ezequiel Sack– es destruir y borrar toda prueba del ejercicio posesorio de las comunidades sobre el territorio de El Alto; con este fin, desde el 2007 (año en que inicia la usurpación y el estrago rural y ambiental) destruyó y profanó lugares sagrados -cementerios y huacas-, cercos de siembra, caminos vecinales, deslindes, y deforestó. A la vez, con la abierta complicidad de policías, jueces y el gobierno provincial de Gerardo Zamora, que se ocuparon de encarcelar, torturar, golpear, perseguir y atemorizar a miembros de las comunidades (ancianos, niños y mujeres), pensando en quebrar la voluntad y resistencia indígena; la empresa alambraba el territorio usurpado y traía animales. Sólo faltaba deshacerse de los animales de las comunidades y despojar a las familias de su único sustento, y de esa parte se encargó una vez más la justicia provincial.

Desde el día del secuestro las comunidades venían reclamándole al Juez información sobre los animales y su restitución, a lo que sólo se contestó que estarían en un campo privado de la localidad de Pampa Muyoj (departamento Capital). Ante la falta de respuesta de la justicia ante la demanda se presentó el pasado 14 de septiembre (después de cuatro meses de reclamos) un "pronto despacho", al que tampoco se respondió. El jueves 8 de octubre, una vez más delegados y autoridades de las comunidades se presentaron ante el Juzgado, pero esta vez la respuesta fue otra: ya no hay animales vivos, murieron todos, aparentemente de hambre y sed.

Comunicación y Prensa U.S.C.

Unión Solidaria de Comunidades

Pueblo Diaguita Cacano

1 comentario:

Re[i]nata dijo...

El grado de civilización de un pueblo se nota en el trato que éste da a sus animales. (M. Gandhi). Hay varias versiones, pero todas recalcan en lo mismo. La perversión y su fruto, la masacre, no distinguen entre especies y empiezan desde l@s más poderos@s para con l@s más débiles.

Mucha fuerza en la lucha!